El destornillador es una herramienta que tiene un mango de madera o plástico y un cuerpo
metálico acabado en una punta que puede tener diferentes formas. Se utiliza
para apretar o aflojar tornillos. Las uniones con tornillos se pueden montar y
desmontar indefinidas veces.
La forma correcta de usarlo es agarrar fuertemente el destornillador
con la mano, hacer coincidir la punta de este con la cabeza del tornillo y
girarlo hacia la derecha, si lo queremos apretar, o hacia la izquierda, si lo
queremos aflojar.
Existen diferentes tipos de destornilladores en función de
la forma de la punta y del tamaño. Según la forma de la punta se pueden
clasificar en:
- destornilladores planos, cuando la punta es plana
- destornilladores de estrella, cuando la punta del
destornillador tiene forma de estrella
Debe utilizarse el destornillador adecuado al tipo de
tornillo que queramos manejar y con el tamaño correcto. De lo contrario,
corremos el riesgo de dañar la cabeza del tornillo e impedir su manipulación.
El principal elemento asociado es el tornillo. Hay gran
cantidad de tornillos en el mercado en función del tipo y tamaño de la cabeza, de la longitud del
tornillo, del diámetro, del tipo de material para el que se usa, del sentido de
roscado, del tipo de rosca, etc.
Según el tipo y tamaño de la cabeza podemos tener cabeza
para destornilladores planos, de estrella o de cualquier otro tipo y con la
cabeza redonda, avellanada, plana, etc. Según la longitud del tornillo podemos
elegirlos desde pocos milímetros hasta varios centímetros. La elección de un
tipo u otro estará en función del lugar donde lo vayamos a utilizar y la fuerza
que queremos que haga. Según el diámetro del tornillo, que vendrá dado en
milímetros, y estará en función del tamaño del agujero donde vaya a ir alojado.
Según el tipo de material donde lo coloque, tendremos tornillos de metal, con
el roscado muy pequeño y muy junto, y tornillos de madera (tirafondos) con el
dentado más grande y más separado. Según el sentido de roscado, lo normal es
que sea a derechas, es decir, que se apriete girando hacia la derecha y se
afloje girando hacia la izquierda. En algunas ocasiones podremos encontrar los
tornillos a izquierdas, cuyos sentidos de giro para el aflojado y apretado son
inversos. Y por último el tipo de roscado; lo normal es que la rosca sea del
tipo métrico aunque también existen roscas Whitworth o tipo redonda que van
cayendo en desuso.
Las principales medidas de seguridad que se deben tomar para
el manejo adecuado del destornillador son las siguientes:
- utilizar siempre el destornillador más adecuado al
tornillo que estemos manipulando. De esta forma evitaremos estropear el
destornillador y el tornillo.
- sujetar firmemente el destornillador.
- no utilizar el destornillador para otra acción que no sea
la explicada anteriormente, como por ejemplo para hacer palanca, golpearlo con
el martillo, hacer agujeros, etc. De esta forma evitaremos deteriorar la
herramienta.
- quitar la mano que nos quede libre de la zona de trabajo
de la herramienta, así evitaremos dañarnos en el caso de que se nos escape el
destornillador del tornillo.
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